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Monitores de actividad para la natación (2ª parte) – 5 preguntas para ayudarte a elegir

Debo confesar que obtener una imagen completa de lo que ofrece el mercado y de lo que yo necesito lleva más tiempo del que pensaba (¿Seguro que necesitas un monitor de actividad para nadar?). Sin embargo, gracias a vuestra ayuda se me han ido aclarando las ideas y tengo una lista de cinco preguntas para elegir con fundamento.

1. ¿DISEÑO O FUNCIONALIDAD?

Algunos monitores de actividad priman el diseño, como los auriculares Bluetooth sumergibles The Dash de Bragi, que hasta sirven para oír música. El reloj Withings Activité tiene un precioso diseño retro (empezando por las manecillas), inusual en un dispositivo “inteligente”. Después está el diseño minimalista de Misfit Shine (llevo usándolo un mes), un reloj que permite registrar datos de actividad bajo el agua.

Sin embargo, a menudo ocurre que el diseño elegante exige renunciar a otras cosas y si lo que buscas es la máxima exactitud, sobre todo para la natación, tendrás que transigir con la estética

2. ¿AGUAS ABIERTAS O PISCINA?

¿En qué se diferencian los monitores de actividad para aguas abiertas y para piscina? El GPS es muy importante en la natación de aguas abiertas porque permite seguir todo el recorrido. En cambio en las piscinas no se puede usar, debido a que la señal no llega al interior de los edificios.

Hay muy buenos dispositivos equipados con GPS que además se pueden usar en la vida diaria, pero por desgracia son bastante caros. Mira por ejemplo el Garmin fēnix® 3 HRSuunto Ambit3 Run o el Polar V800, lo más alto de la gama en su categoría y favoritos de muchos triatletas. Si estás dispuesto a hacer algunas concesiones, el TomTom Multi-Sport GPS Watch resulta muy práctico y su precio es mucho más competitivo. Estos modelos también funcionan en la piscina, pero ¿para qué gastar tanto dinero y después no usar ni una tercera parte de las funciones?

3. ¿EN EQUIPO O EN SOLITARIO?

Esta es fácil. Hay una tecnología muy específica que sólo es útil cuando formas parte de un equipo con entrenador. El resto de los dispositivos son “autoservicio”.

La tecnología Triton está diseñada para ayudar a los entrenadores a trabajar de manera más eficaz, controlando la actividad de varios nadadores a la vez. Avida Sports Swim Faster funciona igual, pero además permite al entrenador comunicarse en tiempo real con sus pupilos.

En Gran Bretaña hay piscinas que ofrecen SwimTag, una pulsera con un dispositivo electrónico incorporado que recibes al entrar en el agua y devuelves al salir. Así el usuario puede acceder a todos sus datos en Internet y hasta tomar parte en competiciones en línea.

4. ¿POR AFICIÓN O PARA COMPETIR?

Los nadadores con experiencia me han enseñado que el ritmo cardiaco es el dato fundamental. Y no es necesariamente malo que se acelere, depende del tipo de entrenamiento que estés haciendo. Para explicarlo de manera breve, cuando llegas a cierto nivel, saber el ritmo cardiaco es imprescindible para mejorar. Normalmente lo puedes leer en LED verdes o en luces infrarrojas, calculado en base al flujo sanguíneo en la piel.

Usar esta tecnología en el agua presenta algunos problemas, lo mismo en la piscina que en el mar. Como solución, Swimovate emplea tecnología “convencional”, con una cinta en el pecho y un reloj inteligente. Sin embargo, aquí también, el hecho de estar en el agua crea problemas, porque el dispositivo tiene que ajustar bien y puede resultar incómodo.

Otra opción es Instabeat, un invento futurista que va en las gafas de natación y mide el pulso en la sien, registra el ritmo cardiaco y muestra los datos en forma de LED luminoso.

Aunque está pensado para profesionales, Xmetrics prescinde del ritmo cardiaco y ofrece en cambio una amplia batería de datos, incluyendo hasta la calidad de la técnica de respiración, gracias a un dispositivo que se lleva en la zona occipital.

5. ¿EN TIEMPO REAL O CON REGISTRO DE DATOS (es decir, reloj inteligente o pulsera de actividad)?

Vale, hemos quedado en que te importan más las funciones que el diseño, nadas en piscina y en solitario y te incluyes en el grupo de los aficionados. Todavía tienes que contestar otra pregunta: ¿cuándo quieres disponer la de información? Un dispositivo con pantalla, o sea, un reloj inteligente, te permite ver cómo lo estás haciendo en tiempo real. A esta categoría pertenecen  Garmin Swim o Swimmo (de una empresa emergente muy prometedora), dispositivos diseñados especialmente para nadadores y que llevan pantalla para ahorrarte contar largos, brazadas y demás. Por supuesto, la pantalla hace que el aparato sea de mayor tamaño y si normalmente el reloj te molesta en el agua probablemente este modelo no sea el más indicado.  Entre los dispositivos que ofrecen información en el momento pero no van en la muñeca, merece la pena mencionar Swimbot, que incluso permite acceder a tutoriales en video para mejorar la técnica y te corrige mientras nadas a través de mensajes de audio.

Las pulseras de actividad, por su parte, funcionan de acuerdo con un principio diferente que consiste en registrar los parámetros de la actividad física para que puedas luego revisarlos en detalle usando aplicaciones. Los más populares son Jaybird Reign, Amiigo, Moov (que incluye hasta funciones de motivación y entrenador personal) y Atlas Smartband (aunque la instalación de los parámetros específicos de natación está todavía anunciada para “próximamente”).

CONCLUSIONES

Si después de estudiar toda esta información aún te quedan dudas sobre el monitor de actividad, pero también tienes curiosidad por saber por qué son tan populares, tal vez no te queda otra que probarlos personalmente.

Mi consejo en ese caso es que compres uno usado o barato (¡incluso puedes pedir uno prestado!), lo uses habitualmente durante al menos un mes y después decidas si le estás sacando verdadero provecho. Puede que amplíe tus horizontes como deportista y se convierta en una agradable compañía y una motivación extra o que lo consideres un trasto perfectamente prescindible. En cualquier caso, tienes que probarlo para decidir.

Después de todo, acuérdate de todos los que hace una década decían “¿para qué voy a necesitar yo un teléfono inteligente?”

Tal vez te baste con una aplicación de móvil para registrar el entrenamiento, videos explicativos y tomar notas…pero eso lo veremos en el próximo artículo. ¡Pronto estará en el blog!