Hoy vamos a hablar de un tema que interesa a muchas personas. Pero, ¡cuidado!, no estoy sugiriendo que mis lectores tengan problemas de peso. En pocas palabras, un nadador que no es competidor, que va a la piscina una/dos o tres veces por semana probablemente lo hace por varias razones, y una de ellas es casi seguro que es para perder un par de kilos, y si no es el caso, para mantenerse tonificado.
Lo más probable es que hayas oído muchas veces lo siguiente: “¡Si quieres perder peso, entonces ponte a correr!”, Y eso, definitivamente es cierto. Correr ayuda mucho a mantenerte delgado/a. Sin embargo, alguien con sobrepeso que empieza a correr, es probable que se encuentre con problemas muy rápidamente. El exceso de peso combinado con una técnica de carrera equivocada causa vertiginosamente dolor y lesiones en las articulaciones y en los tendones.
Por otro lado, no hay peligro, no vas a sufrir estos problemas en la piscina debido a la falta de gravedad casi completa. Por supuesto, también se requiere una buena técnica de natación; si quieres perder peso nadando tendrás que esforzarte, porque, además, nadar de la manera equivocada será un esfuerzo malgastado.
Pero demos un paso atrás y veamos que significa realmente perder peso. Imagina que tienes dos personas diferentes frente a ti, Marco y Lucas. Los dos tienen 30 años, miden 1.80 y pesan 80 kilos. Pero Marco es musculoso, con un físico atlético mientras que Lucas tiene un físico normal y un poco de barriga. ¿Cuál de los dos es el más delgado? ¡Obviamente, la respuesta correcta es Marco! La razón por la que te hago está pregunta tan simple es para que te des cuenta de que no solo tu peso en la báscula es lo que cuenta, la forma de tu cuerpo es algo también extremadamente importante. Estamos elaborados de masa adiposa (grasa) y masa magra (músculo). Los músculos ocupan menos espacio que el mismo peso en grasa debido a su densidad. Una persona musculosa que pesa 80 kilos es menos voluminosa que una persona que pesa 80 kilos, pero con más masa adiposa.
Por lo tanto, perder peso también, y por encima de todo, significa reducir tu porcentaje de masa adiposa y aumentar tu masa muscular. Este principio se aplica a la natación en particular: posee un efecto doble simultáneo en tu masa adiposa y en tu masa muscular. Por lo tanto, pierdes gras a la vez que desarrollar un poco los músculos.
Por tanto, ¿puede la natación ayudarte a perder peso? Sí, por supuesto que puede. Simplemente necesitan ir por el buen camino. Por ejemplo, si crees que nadar largo tras largo lentamente en la piscina será beneficioso, estás muy equivocado/a.
Después de calendar adecuadamente, te presentamos dos sesiones de entrenamiento que puedes probar:
- Intervalos aeróbicos de 100/200m con 10” /20” de descanso para una sesión total entre 20 – 40 minutos.
- Intervalos de 300/400m alternando secciones rápidas (no demasiado rápidas) y secciones aeróbicas (no demasiado lentas), por ejemplo, 50m + 50m con 30 segundos de descanso entre los intervalos con un total de 15-30 minutos de sesión.
Obviamente, estos dos tipos diferentes de sesiones de entrenamiento tiene efectos diferentes, pero esta vez nos hemos centrado en perder peso.
Y, por último, y no por ello menos importante, recuerda: si deseas adelgazar nadando, también tendrás que hacer algunos en tus hábitos alimenticios.