Diseñar la temporada de un triatleta que compite en la categoría de Grupos de Edad* tiene sus dificultades. Haz cuentas. Tres sesiones en la piscina, tres con la bici y tres de carrera en una semana, además de un día de descanso, obligan a programar sesiones dobles algunos días.
Esa limitación te puede hacer plantear la siguiente pregunta: ¿Cómo entreno tres disciplinas diferentes, y en qué orden? Hay tres aspectos a tener en cuenta para idear un plan ganador: que sea específico, que garantice la calidad tanto de las sesiones de entrenamiento como de la recuperación y que se adapte a tu horario.
Un plan específico es aquél que reproduce lo que tienes que hacer durante la carrera. Eso no significa ir siempre al ritmo de competición, sino más bien entrenar de un modo que se parezca a las condiciones de la prueba. En otras palabras, cuando sea posible debes entrenar primero la natación, después el ciclismo y finalmente la carrera. Es mejor entrenar en el mismo orden que compites para que el cuerpo se acostumbre a pedalear después de nadar y a correr al bajarse de la bici.
- Una sugerencia. Te puedes divertir incluyendo lo que llamamos sesiones de ladrillo (por ejemplo, natación-ciclismo-natación-ciclismo o ciclismo-carrera-ciclismo-carrera), en una sesión. Ni que decir tiene que no es fácil diseñar entrenamientos de ladrillo, así que mejor consulta con un experto que te pueda aconsejar.
El segundo factor clave es la calidad del entrenamiento y la recuperación. ¿A qué hora del día o qué día de la semana te sientes más fresco para entrenar? La respuesta a esa pregunta determina cómo programar las sesiones de calidad en el plan semanal. De hecho, deberías realizar siempre las sesiones de entrenamiento de calidad a las horas (o en los días) en que tengas más energía para dedicarles.
- Si tienes planeadas dos sesiones el mismo día, una de calidad para carrera y otra más de natación técnica/aeróbica, mi consejo es hacer la sesión dura de carrera durante el descanso de la comida. Así puedes usar la energía almacenada en el desayuno y el tentempié de media mañana, y dejas el entrenamiento en la piscina para el final del día, como una especie de recuperación activa.
Como el objetivo en este caso es el entrenamiento de calidad y la recuperación, no pasa nada si no cumples el criterio de la especificidad. Recuerda que tienes varios objetivos a lo largo de la semana y que debes cumplirlos todos para rendir al máximo.
Por último, estudia el horario detenidamente. Los deportistas no profesionales tienen mil compromisos, aparte del entrenamiento, que les obligan a programar las sesiones temprano por la mañana o a última hora de la tarde. Cuando hagas el plan semanal, ten en cuenta qué horas del día estás dedicando a entrenar y recuerda que una sesión en el momento equivocado es una sesión perdida.
En resumen:
1. Programa las sesiones de entrenamiento de calidad los días, o los ratos, en que te sientas con más energía.
2. Descansa lo suficiente entre una sesión de calidad y la siguiente.
3. Haz que tus sesiones sean más específicas para el triatlón manteniendo el orden de las pruebas: natación, ciclismo y carrera.
Y por último, pero no menos importante, recuerda que el entrenamiento debe ser divertido y gratificante. ¡No conviertas la diversión en una pesadilla!
* Grupos de Edad, categoría en la que participan deportistas no profesionales divididos por edades.