No hay nada mejor que el ratito de entrenamiento con el que te escapas de la rutina diaria.
Sin embargo, cuando el tiempo escasea y tienes un horario imposible, a veces la diversión pasa factura. Eso sí, sea como sea las chicas no nos arrugamos y afrontamos las dificultades con la cabeza bien alta. Casi siempre .
Por eso hay al menos 5 experiencias que todas compartimos.
1. El hambre que tienes si has pasado la hora del almuerzo en la piscina.
2. El propósito firme de “peinarme hoy como es debido”. No te lo crees ni tú.
3. La sensación de entrar en el vestuario sabiendo que te quedan diez segundos para cambiarte.
4. Las ganas de pasar desapercibida cuando te das cuenta de que hace mucho desde tu último depilado
5. La explosión de energía y vitalidad que experimentas al volver a clase o al trabajo.