Sandalias para la piscina: Permanece erguido y mantén tus pies saludables

Habrás visto el aviso miles de veces: “No se permite calzado externo en las dependencias de la piscina.” Para prevenir el arrastre del polvo y arena exterior dentro del área de la piscina, la mayoría de ellas requieren dejar el calzado habitual en los vestuarios. Esto significa que necesitas cambiarte y llevar unas sandalias de piscina de algún tipo. Puedes ir descalzo si está permitido, pero el calzado de piscina ofrece dos beneficios importantes (que es por lo que con frecuencia es obligatorio): seguridad y salud en los pies.

El área en los bordes de las piscinas generalmente está húmeda por supuesto, y aunque sea de cemento o de cerámica, tiende a resbalar, lo que puede ser peligroso incluso aunque andes con cuidado por las inmediaciones. ¡A nadie le apetece romperse los huesos! Las sandalias de piscina pueden proporcionarte un agarre más óptimo en las superficies húmedas.

La otra razón para llevar calzado en proteger tus pies de las bacterias y microorganismos a los que les apasiona crecer en entornos cálidos y húmedos como las juntas entre el suelo de las piscinas. No importa lo limpias que parezcan las piscinas o lo alto que sean los estándares de limpieza desinfectante allí, hay grandes probabilidades de que haya desagradables visitantes microscópicos creciendo por allí. Es inevitable en los espacios públicos. Todo el mundo conoce lo que es el pie de atleta (su nombre procede por su tendencia a extenderse a través de los vestuarios), pero también puedes contagiarte otras cosas en la piscina. Las verrugas plantares, que están causadas por un virus que generalmente invade la piel a través de pequeños cortes y abrasiones y los hongos en las uñas de los pies, una infección por debajo de la superficie de la uña que causar su decoloración, son ambas infecciones tenaces que se pueden contraer andando descalzo en entornos calientes y húmedos. Por tanto, lleva tus sandalias de piscina en la ducha y en el vestuario también además de en el suelo  alrededor de la piscina (Lavar los pies con agua jabonosa y secarlos cuidadosamente entre los dedos también puede ayudar).

¿Qué debes tener en cuenta en una sandalia de piscina? Las buenas sandalias de piscina deben ser cómodas (muchas de ellas están fabricadas de material suave EVA), secarse rápido, proporcionar tracción en las superficies húmedas y poseer orificios de drenaje para canalizar la salida del agua de tus pies. Otra ventaja es su resistencia al cloro.

En la piscina, por regla general, necesitas más agarre que estabilidad, por tanto las sandalias de dedo y las deslizantes que son fáciles de poner y quitar, tienden a ser los estilos más populares en las sandalias de piscina. Arena ofrece una variedad de diseños para hombre, mujer y niños, así como estilos también unisex. Cualquiera de las opciones que elijas, asegúrate que tus sandalias no sean demasiado amplias. ¡No sirve de nada una buena tracción en la base si tu pie se desliza dentro del calzado!

Para alargar la vida de tus sandalias de piscina, asegúrate de aclararlas y secarlas al aire después de su uso. No dejes tus sandalias húmedas en una bolsa de plástico o en tu bolsa de piscina, ni las dejes al sol durante mucho tiempo.

¿Cuál tu estilo favorito de sandalias de piscina? ¿Has notado nuevas tendencias en el calzado de tu piscina favorita?

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