¿Cómo explota un atleta todo el potencial de su físico? No hay una respuesta sencilla a esa pregunta. Depende del objetivo que te propongas. Existen diferentes tipos de entrenamiento, cada uno de los cuales cumple una función, y todos ellos tienen sus propias rutinas:
Cada mes te vamos a introducir en las peculiaridades de uno distinto, centrándonos en los efectos que produce y sugiriendo rutinas de ejercicios para que las pruebes. Hoy empezaremos con el entrenamiento de resistencia y densidad.
El entrenamiento de resistencia es muy importante porque te permite ganar vigor y reducir el esfuerzo. En otras palabras, le da a tu brazada el máximo de fluidez y eficiencia posible. La idea es aguantar un ritmo sostenido durante un periodo de tiempo largo. El concepto “velocidad de crucero” lo define a la perfección.
Hay varios test para medir tu velocidad aeróbica:
1. T-30, test de 30 minutos
Digamos que nadas 2000m en 30 minutos. Con un cálculo muy simple puedes averiguar tu velocidad aeróbica media en 100m: 30 (minutos) x 60 (segundos)/ 20 (porcentaje de la distancia total cubierta en 100m) = 90 (segundos)
También puedes probar lo siguiente usando el mismo método de cálculo:
2. T-500 o T-1000, test de 500 o de 1000 metros
Elige el test que se ajuste mejor a tus habilidades. Si eres principiante, empieza por el T-500 y repítelo en el espacio de unas semanas. No pases a los siguientes hasta que no hayas conseguido una mejora sustancial.
Si, por el contrario, eres un nadador máster o compites, opta por el test T-1000 o el T-30. Recuerda lo que dijimos en el artículo “Aquí empieza la senda del éxito”: hacer pruebas regularmente y anotar los resultados es muy importante para comprobar tus progresos.
Piensa que mejorar tu resistencia puede llevarte meses, no días o semanas.
El concepto en que se basa este tipo de entreno es la densidad.
El entrenamiento de densidad viene definido por la relación entre la distancia que nadas y el tiempo que empleas. Las sesiones de entrenamiento más densas son preferibles, aunque sean más cortas, a otras más largas pero menos densas.
Y ahora ponte a prueba: usa la siguiente rutina (adaptada a tu nivel) para comprobar por ti mismo el concepto de densidad aeróbica.
PRINCIPIANTE:
Total: 2.400m en 45 minutos
NADADOR MÁSTER (M) o DE COMPETICIÓN (C)
Total para el nadador máster: 3.400m en 1hora y 15 minutos
Total para el nadador de competición: 6.200m en 1 hora y 50 minutos
Por supuesto, puedes ajustar tu entrenamiento como mejor te parezca. La primera vez puedes intentar nadar 3.000 metros de crol en una hora. Pero cuando pasen los meses trata de ir introduciendo otros estilos (por ejemplo espalda), trabajo de piernas (con aletas para empezar), trabajo de brazos (pullboy y paddles) y trabajo de brazada, como te vamos a sugerir en los siguientes artículos.
Así que, recuerda: la clave para la mejora aeróbica reside en el entrenamiento de densidad. Es lo primero que necesitas para progresar.
—————
¿Estás buscando el traje de baño ideal para tus necesidades específicas? ¡Echa un vistazo aquí!